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martes, 13 de diciembre de 2011

La Iglesia está en deuda con las Mujeres


Para la Marcha del día mundial en contra de la violencia hacía la mujer había un lienzo con una frase que decía “La Democracia esta deuda con las mujeres”, esto me llevo a una comparación sobre el actuar de la Iglesia hoy y como las Iglesias Fundamentalistas son un soporte para la desigualdad y exclusión de la mujer en la sociedad.

¿Cuáles son esas Iglesias fundamentalistas que promueven la desigualdad y la subordinación de género, que han generado desprecio obstaculizando el desarrollo de una sociedad sana?

En el año 1910 nace en EEUU un Movimiento para rechazar el pensamiento moderno en la interpretación bíblica y también el uso de los métodos científicos e históricos, este se generó a través de una publicación de una revista llamada “Los Fundamentos” donde expresa una aceptación literal de las doctrinas como el nacimiento virginal de Cristo, la resurrección corporal de Cristo, y especialmente, la inspiración literalmente de cada palabra de la escritura, la infalibilidad verbal de las escrituras Sagradas. Este movimiento creció enormemente en EEUU de donde provinieron hacia América latina con una fuerte presencia “evangelizadora” estableciendo en Chile un pensamiento “Evangélico” alienado con el sistema hegemónico dominante. El fundamentalismo si bien nace en Iglesias Protestantes conservadoras de los EEUU, en el Catolicismo el Opus Dei (el sector más conservador) tiene mucho influencia tanto a nivel político, educacional, económico, donde representan la elite más poderosa de nuestro país, donde a pesar de ser polos excluyentes con otras tradiciones en tema de género representan lo mismo.

¿Cuáles son las principales características de este pensamiento fundamentalista en las Iglesias Cristianas que no permite el avanzar a los desafíos de una sociedad actual?

1.       El deseo de imponer control sobre las mujeres: negando una educación avanzada a las mujeres, espacios de liderazgo, normando su vestimenta y privándolas del espacio público dedicándolas a lo domestico.

2.       La restricción de la sexualidad: La hostilidad y miedo de la sexualidad de las mujeres, imponiendo la complementariedad entre los géneros hombre y mujer, como realidades fijadas y no cambiables.

3.       La inferioridad de la mujer ante el hombre: Hombre como más inteligente, más racional, activo, agresivo. La mujer, inferior, intuitiva, emocional, pasiva, naturalmente dependiente. Rechazan ideas modernas de igualdad de mujeres y hombres con capacidades semejantes.

4.       El rechazo los derechos reproductivos de las mujeres: Las mujeres no pueden limitar el acceso sexual del marido a ellas. El cuerpo de la esposa es propiedad del marido. El marido puede usarla en cualquier manera que quiere. La mujer no puede usar anticonceptivos para limitar el número de hijos/hijas. ni puede abortar un feto que no quiere o no puede soportar.

Lo más importante es el rechazo de la posibilidad de las mujeres como personas que tomen decisiones especialmente en el campo sexual y reproductivo, manteniendo un sistema patriarcal en todo el sistema de Iglesia como de transmisión a la sociedad.

En nuestro país hay un fuerte aumento en el nivel de violencia contra la mujer de todos los tipos: violación, violencia doméstica. Al mismo tiempo también en el mundo, continúa un alto nivel de falta de educación de niñas en comparación de los niños, de analfabetismo de las mujeres, de pobreza femenina y la pobreza de niños/niñas dependientes de una madre soltera. Las Iglesias cristianas debiesen ser fuentes de esperanza, libertad y transformación de nuestra sociedad y no lo contrario.

Debemos reconocer a las mujeres feministas quienes han elaborado importante material teológico para vivir una fe consecuente al testimonio de Jesús de Nazaret en nuestro contexto, lamentablemente han sido censuradas por las mismas Iglesias Fundamentalistas etiquetando el feminismo como algo “mundano”, loco y antinatural, como la introducción de caos y desorden en la sociedad, de degeneración, irresponsabilidad en la familia y una búsqueda de placer sexual. No obstante muchos hablan más del prejuicio y de la desinformación, que de hacerse cargo de las responsabilidades del actuar desde nuestra Fe.

La igualdad entre mujeres y hombres, promovida por el evangelio es necesaria, los hombres y mujeres deben trabajar juntos en la familia y la sociedad, para una planificación familiar eficaz es imprescindible la educación y el desarrollo social de las mujeres. Planificación familiar eficaz no es simplemente un asunto de echar anticonceptivos a la gente pobre. Es necesario un desarrollo holístico de la salud de mujeres, niños, y la familia en general en la comunidad.
No es suficiente que las mujeres ganen educación, empleos pagados o ciertos lugares de “reivindicación”. Es necesario promover en las Iglesias que los hombres superemos nuestro sexismo y abuso de las mujeres y respetemos a las mujeres como seres humanos dignos.

Ser seguidor de Jesús no es ser promotor de un sistema que aniquila, oprima y fomente la desigualdad, todas y todos en cuanto somos compañero/as de este camino debiéramos impulsar lo mismo que causaba Jesús con sus iguales, el respeto a la diversidad en el encuentro con la Samaritana, el centurión romano, Marta y Maria por nombrar algunos relatos donde precisamente hacia todo lo contrario de lo que propone el fundamentalismo.

La Iglesia está en deuda que no tiene nada que ver con llamarse seguir o seguidora de Jesús.

Josaphat.
Diciembre 2011